Tras el éxito de Emprende Pro Mujer en el sureste de México, Pro Mujer amplió la incidencia en el país del modelo híbrido de la plataforma, para brindar capacitaciones presenciales a emprendedoras de tres estados de la zona metropolitana: Estado de México, Ciudad de México e Hidalgo.
Gracias a la ampliación de este modelo de formación al centro del país, 210 emprendedoras lograron mejorar su manejo financiero, calcular costos, implementar ahorros e impulsar su negocio a través de herramientas digitales.
Emprende Pro Mujer, la plataforma de formación emprendedora de Pro Mujer, se lanzó en 2021 y actualmente ha impactado en la vida de más de 42 mil mujeres de América Latina. Fue en 2022 que la plataforma se adecuo para impactar a mujeres rurales e indígenas del sureste de México, logrando resultados que han permitido la ampliación territorial de nuestro modelo.
Hoy en día, el modelo híbrido de Emprende Pro Mujer ha expandido su alcance más allá de las fronteras mexicanas, alcanzando a mujeres de Centroamérica en los países de Guatemala y El Salvador. Desde su lanzamiento en el 2022, más de 2.680 mujeres se han beneficiado de estas oportunidades híbridas de capacitación.
Este modelo formativo fue diseñado desde una óptica interseccional que integra soluciones para atender las limitaciones particulares de las mujeres en contextos vulnerables. Por lo tanto, incorpora sesiones de formación presenciales, guiadas por facilitadoras expertas en el trabajo de campo, y sesiones digitales que se realizan a través de Whatsapp, la red más asequible para mujeres con conectividad y habilidades digitales limitadas.
Impulsar el microemprendimiento femenino a través de oportunidades de capacitación y mentoría, resulta indispensable para que las mujeres puedan hacerle frente a la inequidad de género en materia laboral y económica.
En la Ciudad de México, el Estado de México e Hidalgo, sólo el 42.5% de las mujeres son económicamente activas, enfrentándose a una brecha de ingresos del 15.2% en comparación a los hombres (IMCO, 2023). En conjunto, en estos tres estados existen más de 1.8 millones de mujeres operando en la informalidad (INEGI).
Rocío Hesiquio, una emprendedora de Xochimilco, considera que la capacitación fue una oportunidad enriquecedora: “Me abrió el panorama en muchos aspectos. Aprendí a tener mi negocio en orden, a sacar costos, y lo principal, a administrar mis ganancias priorizando el ahorro. Gracias a esto modifiqué los costos de mis productos, y llevo un seguimiento detallado de mis gastos. Me siento preparada para seguir creciendo”.
Emprende Pro Mujer seguirá impulsando la capacitación de las mujeres mexicanas en la zona y busca seguir ampliando su impacto a través de alianzas y socios estratégicos que le permitan ampliar su incidencia territorial.