A diferencia de otras, América Latina y el Caribe es considerada una región joven, donde las personas mayores de 60 años representan alrededor del 13,8% de la población total. Sin embargo, según proyecciones demográficas, se espera que para 2050 el 25% de la población en esta región tenga 60 años o más (FIAP).
La Economía Plateada, o silver economy en inglés, es aquella parte de la economía global vinculada al cambio demográfico producido por el envejecimiento de la población, cuyo enfoque se centra en las necesidades y demandas de las y los adultos mayores (BID). Para la región de América Latina y el Caribe, la Economía Plateada representa cada vez más una oportunidad económica en sectores como el turismo, los cuidados y la vivienda.
Durante la quinta edición de Foro GLI Latam 2024 en Buenos Aires, Argentina, se llevó a cabo el panel “Economía Plateada: Oportunidades y Desafíos” en la que voces líderes del sector discutieron cómo esta transformación demográfica puede convertirse en un motor de desarrollo económico y social. El panel fue moderado por Liliana Parodi, Co-Chair del Silver Economy Forum LATAM, un foro regional que impulsa oportunidades de la Economía Plateada y los principios de la igualdad etaria.
El panel también contó con la participación de Cristina Paredes, Oficial Senior de inversión del sector financiero para países del Cono Sur en BID Invest; César Rafael García, Director General y especialista de Silver Economy en AVU; y Cecilia López Mendieta, Program Manager de SilverTech en Eidos Global. La conversación se centró en los retos y oportunidades profesionales en torno a la población de personas adultas mayores desde una mirada de género e inclusión.
Liliana abrió el panel con una importante reflexión: Yo no me siento una persona que tenga que salir de la actividad. “¿Qué pasa con la actividad después de los 50, 60, o 70 años? ¿Qué pasa con la economía?” Al hablar de las personas mayores, o de la tercera edad, relacionamos la longevidad o cumplir años con la vulnerabilidad, y al abordar las oportunidades que presenta la Economía Plateada, se busca transformar esta narrativa.
Tal como lo plantea Cristina, existe una noción de que la vida se desarrolla en tres etapas:
“La juventud es igual a estudiar, madurez igual a trabajar y la vejez es jubilación”. No obstante, la Economía Plateada nos enfrenta a un cambio de paradigmas con relación a cómo vemos la edad. “Pronto vamos a ser más silvers que jóvenes”, añadió durante su intervención.
Se proyecta, de acuerdo a estudios del BID, que la región de América Latina y el Caribe presente el mayor ritmo de envejecimiento poblacional del mundo en las próximas décadas. Dado a que la expectativa de vida es cada vez más larga, nos enfrentamos a nuevos desafíos y oportunidades en diferentes sectores, especialmente en el sector de empleo, del trabajo, y de las finanzas: “La Economía Plateada se presentó como un gran motor de generación de empleo y eso también es un cambio de paradigma”.
César, de AVU -un hub de innovación que aborda temas de vejez en América Latina-, resaltó que, para 2.100, casi la mitad del planeta va a tener más de 60 años. Asimismo, planteó una importante pregunta: ¿Dónde se va invertir el dinero? Para responder a esta interrogante, plantea César, es necesario abordar la Economía Plateada con un enfoque en dos diversidades: La diversidad etaria y la de género.
Según la CEPAL, el 23,9% de las mujeres en América Latina se encuentra en situación de pobreza. Además, se enfrentan a un escenario aún más desafiante al llegar a la vejez, ya que, como señala César, llegan a esta etapa con un 33% más de pobreza en comparación con sus contrapartes masculinas.
Por su parte, Cecilia de Eidos Global resaltó sobre la intersección del trabajo, la tecnología y la generación plateada: “Muchas veces, a los 45-50 años estamos buscando reinventar nuestras carreras profesionales…Cuando pensamos cómo evoluciona la trayectoria laboral en el ciclo de vida, se ve como una forma de U invertida hoy”.
Sin embargo, debido a los sesgos que prevalecen en el sector productivo respecto a la edad, son escasas las oportunidades profesionales que abrazan cada etapa de la vida adulta. Cecilia añadió que es necesario distinguir entre multigeneracionalidad (incorporar talento silver en las empresas) e intergeneracionalidad (promover que las generaciones puedan articularse entre sí, vincularse y potenciarse), entendiendo que los equipos intergeneracionales son más productivos y las generaciones, cuando se conectan, aprenden y se potencian mutuamente.
Entre los puntos más importantes a destacar de la plenaria es que, para que la Economía Plateada funcione, se necesita del sistema financiero y de su capacidad de innovar para satisfacer las necesidades de esta economía emergente. Consciente de esto, Cristina subrayó la urgencia de desarrollar nuevos productos y servicios financieros que se alineen con estas realidades. “No pensábamos antes que a los 60 alguien tuviera la necesidad de emprender. Hoy sí… es una oportunidad muy importante que el sector financiero está mirando” añadió.
De la misma manera, los y las expertas resaltaron que otro de los retos que enfrenta la Economía Plateada es su articulación con las prácticas de contratación y desarrollo de talento de las organizaciones. Cecilia subrayó el protagonismo que tienen las empresas a través del diseño e implementación de políticas que promuevan esta nueva economía: “En SilverTech tenemos muchas personas interesadas en formarse en tecnología, pero si del otro lado no hay quien las contrate, hay algo en el camino que se pierde”, dijo. “Vivimos en un mundo donde el futuro es tan incierto que necesitamos fortalecer nuestras habilidades de flexibilidad y aprendizaje continuo”.
El enfoque de género en la Economía Plateada
Según Cristina, se estima que el mercado de la Economía Plateada alcance un valor entre 2 y 15 billones de dólares. Sin embargo, la experta destacó que, a pesar de las numerosas oportunidades económicas que ofrece la generación plateada, existe un significativo riesgo de exclusión financiera debido a la brecha digital y la de género.
El acceso limitado a la tecnología impide que muchas personas mayores participen plenamente en la economía digital, situación que se ve exacerbada por diferencias de género en el acceso financiero: según el Banco Mundial, en la región las mujeres tienen un 20% menos probabilidad que los hombres de tener una cuenta bancaria, lo cual subraya la doble desventaja que enfrentan las mujeres mayores en términos de inclusión financiera.
No obstante, son las mujeres mayores de 50 años quienes están causando un impacto visible en la Economía Plateada. César resaltó que el 54% de emprendimientos en este sector pertenecen a mujeres de esta franja etaria. Además, mencionó que el 72% de las personas mayores de 60 años son suficientemente activas tanto cognitiva como físicamente, lo que abre puertas en diversas industrias.
El desafío es claro: Se puede potenciar la Economía Plateada desde la construcción colectiva, donde todos los actores de la sociedad, incluidas las personas mayores, empresas, sistemas financieros y gobiernos, tienen un papel crucial. Este enfoque colectivo no solo mejora la vida de las personas mayores, sino que también transforma la sociedad, promoviendo un entorno donde cada contribución es valorada y celebrada.
