6 Preguntas y Respuestas Sobre la Regulación en Bolivia al Director, Gonzalo Alaiza

Por Gonzalo Alaiza Alborta, Director de Pro Mujer en Bolivia

1.- ¿Qué significa ser una entidad regulada en Bolivia? Dar un vistazo general sobre que es – ¿Es el mandato de quién? ¿Cuándo empieza y termina?

La regulación en Bolivia es el mecanismo mediante el cual la ASFI (Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero), regula el Sistema Financiero Boliviano. Esto se viene dando en nuestro país hace más de 30 años y el prestigio que goza la regulación boliviana es muy alto y muy importante.

La regulación para las ONGs o Fundaciones Sin Fines de Lucro, que se han denominado Instituciones Financieras de Desarrollo (IFDs) comienza el año 2008. La Circular estipula que una vez obtenido el certificado de adecuación, la IFD tiene un año para adecuarse a las exigencias de ASFI y obtener la licencia de funcionamiento, por cuanto no tiene fecha de culminación. Todas las IFDs están en este proceso, pero ninguna ha obtenido todavía la licencia de funcionamiento.

2.- ¿Cómo afecta a Pro Mujer en Bolivia y a Pro Mujer como organización? ¿Cuáles son las implicaciones de esta iniciativa?

Varios años antes Pro Mujer en Bolivia decidió auto regularse. Esto muestra una muy buena señal al mercado y en general a todos los grupos de interés, porque visibiliza la predisposición de Pro Mujer a llevar adelante prácticas sanas de manejo administrativo y operativo. Llegar a ser regulada significaría un avance importante para Pro Mujer como organización ya que la ASFI es reconocida nacional e internacionalmente.

3.- ¿Cómo queda  dentro de nuestra estrategia global?

La estrategia global no se ve afectada porque la estrategia y la visión de Pro Mujer en Bolivia están alineadas con el resto de la organización.

4.- ¿Cuáles son los beneficios para la organización y nuestras socias? 

El principal beneficio para Pro Mujer es que esta iniciativa formaliza la adecuación a normas y prácticas sanas de manejo financiero, de manejo crediticio, de manejo operacional, de control y mitigación del riesgo. Por otra parte, nos ofrece la posibilidad de obtener financiamiento de instituciones que solamente prestan a entidades locales y no así a entidades internacionales.

Otra ventaja importante es la posibilidad de acceder a depósitos del público, que tiene dos connotaciones; la primera que nos permite fondear nuestras operaciones a futuro con una tasa de interés posiblemente más baja, una vez se tenga la licencia de funcionamiento; y en segundo lugar, permitirá a nuestras socias y mujeres de cualquier índole, ahorrar directamente en nuestra institución. Esto no será sólo una mayor comodidad al complementar a otros servicios que brindamos actualmente en nuestros centros, sino sobre todo les permitirá crear una muy necesaria red financiera de seguridad para protegerlas en caso de emergencias como accidentes, enfermedades graves o ventas mediocres relacionadas con sus empresas.

5.- ¿Habrán algunos efectos negativos? 

Por ser regulada, estaremos sometidos a reportar mayor información. Mientras que esto nos ayudará a mejorar nuestros procesos, también implica mayores costos para nosotros como organización. Estos costos reducirán los recursos que tenemos disponibles para continuar la expansión para llegar a más mujeres y cumplir nuestra misión. Sin embargo, con muchos amigos firmes y partidarios, estoy seguro de que seguiremos progresando.

6.- ¿Cuánto tiempo tardará para ser una organización regulada?

Las IFDs son únicas en el sentido de que no sólo proporcionan servicios financieros pero también proporcionan servicios complementarios, como en nuestro caso que también brindamos capacitación y atención de la salud. Parte de la respuesta a esta pregunta depende de ASFI cuando aclaren preguntas pendientes sobre la categorización legal de IFDs, así como finalizar los reglamentos que las gobiernan.

Habiendo dicho esto, estamos en buen camino a la obtención de nuestro certificado de regulación que deberíamos recibir en aproximadamente 60 a 90 días. Después, tendremos aproximadamente un año para cumplir con las normas de la ASFI, por lo que esperamos recibir nuestra licencia en algún momento en 2012.

En la portada de la edición del 20 a 27 de junio de "Análisis,” el semanario boliviano dice, “La presencia urbana de Pro Mujer. La segunda IFD del país se hace cada vez más nítida en las ciudades, cuando se aproxima la obtención de su licencia como entidad regulada”.